ANANDA CABALLO

   Cuando necesitas elegir, es porque estás totalmente manipulado por tu ego. Elegir es una ilusión del ego, y lo es porque tú eliges aquello que crees que es bueno, pero sólo puedes creerlo, no puedes saberlo a ciencia cierta. Toda creencia pertenece a tu ego. Tú nunca puedes saber lo que es bueno y lo que es malo, nunca puedes saber donde está el bien y donde está el mal, para saberlo tendrías que haber creado tú la vida, y la vida es algo que tú no la has creado, ¿cómo lo vas a saber entonces?. 

   Deja de soñar ya, tanto si eliges A, como si eliges B, las dos opciones te van a llevar al mismo sitio, da lo mismo que elijas una cosa o elijas otra, las dos te van a llevar a la decepción. Tú has elegido lo que creías que era mejor para ti, y lo que tú estás creyendo, siempre es en función de los intereses de tu ego. Tú eliges aquello que crees que te va a reportar un beneficio y una felicidad, pero repito, solamente es una creencia, porque tú no has creado la vida, y por lo tanto no puedes saber donde está el bien y donde está el mal. La realidad de la vida es otra distinta, y cuando pasa el tiempo, te das cuenta que aquello que has elegido no es como tu pensabas.

   Eliges porque todavía no tienes conciencia de cómo funciona la vida, eliges porque todavía desconoces lo que está pasando en tu interior, eliges porque no tienes confianza con la vida. Tú desconfías de la vida, no ves a la vida como tu amiga, por eso no te dejas llevar por ella, no tienes suficiente confianza con ella. Tú has venido a este mundo porque ha sido la vida quien te ha traído, estás aquí por ella, y ella no te atraído aquí para hacértelo pasar mal, la vida siempre es tu amiga, siempre está contigo, tú no lo puedes ver porque estás dormido, pero la vida siempre está de tu parte.

    Si pudieras ver que la vida está contigo, que es tu amiga, no necesitarías elegir nada, simplemente te relajarías y te dejarías llevar por ella, irías allí donde ella te llevara, le dirías si a lo que ella te ofrece, pero tu excesivo miedo a equivocarte y tu desconfianza con la vida, hacen que quieras controlar todo. Controlas hasta tus sentimientos, no quieres enamorarte de algo distinto a tus sueños, a tus ideales, te crees y piensas que todo aquello que no está en tus ideales y gustos, no va a ser bueno, o quizás piensas que si accedes a aquello que no está en tus ideales y gustos, vas a dejar de ser tú mismo. 

   La identificación con tus gustos e ideales, te mata y te esclaviza, la identificación no te deja opción a que lo supremo y lo divino pueda sucederte. Cuando estás en esa posición egótica, te conviertes  en un ser dividido, una parte de ti quiere elegir aquello que entra en tus ideales, y otra parte de ti no se queda indiferente ante lo nuevo que está surgiendo. Pero, ¿qué eliges?

   Elegir crea tensión y sufrimiento, dentro de ti se crea una división, y esa división mata por dentro. Lo que yo te digo es que no elijas absolutamente nada, ni una cosa, ni otra. 

   La vida es muy sencilla, es muy fácil, no está hecha para elegir nada, tienes que aprender a vivir sin mente. Vivir sin mente es vivir acorde a la realidad de lo que está sucediendo, vivir sin mente es unificarte a la conciencia universal. Es tan sencillo como no elegir nada; sí tienes frio ves al fuego a calentarte, si tienes calor, ves al agua para refrescarte. Eso no es elegir nada, simplemente es acceder a lo que necesitas, no tienes opción de elegir nada, o te calientas o mueres de frio, o te refrescas o mueres de calor.

   Es muy posible que tú necesites amor, mucho amor además, por eso incluso has creado una ilusión, estás enamorada de una persona que ni siquiera has estado con ella, estás enamorada de una imagen que tienes creada en tu mente como producto de esa necesidad. Tú tienes creencias, ideales, y sueños, por eso piensas que esa persona de la que estás enamorada, va a satisfacer tus ideales. Pero no estás viviendo la realidad, estás viviendo en un sueño, tú tienes la necesidad de amor y no lo estás teniendo porque tus sueños te llevan a un destino donde no puedes acceder a aquello que estás necesitando, si en lugar de soñar vivieras la realidad, ya estarías satisfaciendo tus necesidades reales desde este mismo instante.

   Elige quien está dormido, porque si estuviera despierto sabría que no hay nada que elegir. Aquellos que eligen, son seres oscuros, no tienen luz,  el que no elige, no tiene conflictos internos, no está dividido, es uno con la vida, es un ser relajado porque tiene confianza con la vida y va allí donde ella lo lleva. 

   Es muy fácil, si tienes frio ves al fuego para calentarte, si tienes calor ves al agua para refrescarte, si necesitas amor arrímate a aquel que pueda darte amor, pero arrímate, sé practico y no teórico, pensar es pura teoría. Él que es práctico vive con realidad, y él que es teórico vive engañado por sus pensamientos y teorías. A dios te lo puedes encontrar en la práctica, nunca lo encontraras en la teoría. Si tienes frio arrímate al fuego, si necesitas amor arrímate a quien te lo pueda dar, pero arrímate, no te quedes pensando, no hay nada que pensar. La gente se muere pensando, no viviendo, y yo te digo que hay mucha diferencia entre una cosa y otra, la vida pensando, no merece la pena vivirla.

    Yo te hablo así porque alguien tiene que venir a tu vida y romper todos tus sueños, llevas muchos años soñando con una ilusión, y lo más grave es que piensas que esa ilusión es algo tuyo, piensas que tiene algo que ver contigo, piensas que aun se tiene que realizar ese sueño. Si ese sueño se realiza, seguirás dormido porque los sueños alimentan los estados de ensoñación, y mientras sigas dormido nunca podrás despertar. Cuando todos tus sueños se rompan, cuando te quedes sin pasado y sin futuro, habrás despertado, y sólo cuando despiertes podrás amar.   

José Mª Carrión